viernes, 1 de febrero de 2008

Mensaje Patriarcal de Cuaresma 2008


Cuaresma 2008

Queridos hermanos en Cristo:

Que la Paz del Señor esté con todos ustedes y que su amor los impulse a abrazar al Mundo.

En esta ocasión me dirijo a ustedes como vuestro padre espiritual, con el fin de exhortarlos a que se conviertan a Cristo; dejen que su amor incondicional e infinito los inunde completamente, transformando sus vidas en verdaderas llamas de esperanza para este Mundo oscurecido.

Regresemos todos en unidad al seno de nuestro Padre el cual , nos regala su amor en Cristo Jesús, y nos invita a transitar esta vida como un camino de luz hacia la plenitud en Él.
No temamos en arrancar de nuestras vidas aquellas cosas superfluas que hacen que nuestro caminar sea pesado y tortuoso, liberémonos de las cargas del pecado , de ese pecado que se nos adhiere en la peregrinación, de ese pecado que obstruye nuestro relacionamiento con nuestro Padre Creador. Miremos la cruz y sintamos en el dolor profundo que el Amor Verdadero causó a Dios, ese dolor de ver a sus hijos dispersos, lejos de su corazón, alejados de presencia; ese dolor debe ser el que nos impulse a hacernos responsable del mensaje que Cristo nos dejo, ese mensaje de Amor esperanzador y plenificador.
Leamos nuevamente el Evangelio en este tiempo, y sintonicemos su mensaje salvífico al accionar de nuestra Iglesia Patriarcal para que al llegar el Viernes Santo podamos morir con Jesús y resucitar luego re-creados por su Amor.
Conviértanse y entréguense a la voluntad de Dios ; no teman, Dios nos invita a trabajar junto a él en su mies, seamos fieles a ese llamado.
La Iglesia se prepara en todo el Mundo a vivir este tiempo de esperanza, en donde Dios cumple su promesa, dándonos la vida de su Hijo por nuestra salvación, muriendo de Amor por los seres humanos; por eso solo nos queda aferrarnos a ese amor y surcar los caminos de los tiempo predicando la verdad que se nos ha sido revelada en Cristo.
Dios se hace hombre y muere por los hombres, por TODOS, Dios da su vida a todos los que lo busquen libremente, el da su Espíritu a quién lo piden, pues Dios es el Dios de la Libertad y el AMOR.
Vivamos esta cuaresma con verdadero espíritu de conversión , y lleguemos a resucitar con Él, en la madrugada del domingo glorioso.
Les recomiendo que en este tiempo vivan austeramente, oren incesantemente por la Iglesia Patriarcal, y su extensión por el Mundo; pero sobre todo amen mucho , abracen al hermano hasta que sus brazos caigan exhaustos .

Seamos fieles a Cristo y a su mensaje de salvación del que somos sus heraldos.

Un Abrazo en Cristo


+++ SEBASTIÁN, Arzobispo Primado – Patriarca de la Comunión





Su Beatitud Monseñor
+++ Sebastián Camacho Bentancur
Arzobispo Primado de la Iglesia Católica Apostólica Antigua del Río de la Plata
Patriarca de la Comunión Apostólica Ecuménica Mundial

Sede Patriarcal de Montevideo